Guerra, violencia, guerrillas (89 / Mayo - Junio 1987)
Nº 89 — Mayo - Junio 1987

Guerra, violencia, guerrillas

Reafirmar el compromiso de la lucha democrática y, a la vez, entregar material sobre el peligro que corre nuestro continente por no haber superado los puntos clave que han hecho de Ernesto Guevara un histórico «Che», es uno de los propósitos de esta edición.

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Tema central

La contrarrevolución como empresa privada. El apoyo norteamericano a los Contras

Contra el olvido de los asombrosos eventos ocurridos en Washington a fines de 1986, el presente artículo describe la red de ayuda no oficial norteamericana a la contrarrevolución nicaragüense. Hasta las devastadoras revelaciones del mes de noviembre sobre traspasos ilegales de armas a los contras, el gobierno de Reagan - desafiando la prohibición del Congreso y violando otras leyes del país - estaba arrogantemente resuelto a salirse con la suya respecto de Nicaragua Washington no sólo había retirado los obstáculos para cualquier individuo o grupo que quisiese ayudar a los rebeldes antisandinistas, sino que orquestó y administró estas actividades a través de la CIA y del Consejo Nacional de Seguridad. Los esfuerzos de ciudadanos particulares pueden dividirse en las siguientes categorías: 1) grupos de presión política o cabildeos y propaganda; 2) recolección de fondos; 3) ayuda no mortífera y 4) armamento y entrenamiento. Empero, la asistencia privada ha sido más importante en lo político que en lo militar. Esta funciona como una señal de estímulo para los contras, un obsequio para la Nueva Derecha nacional y un mensaje para el Congreso y la prensa en el sentido que el pueblo norteamericano respalda los esfuerzos de Reagan para derribar a los sandinistas. Y lo más importante, sirve de cortina de humo para el envío por parte de la CIA de armas y material de guerra hacia los contras y oculta lo más fundamental que es la ayuda financiada por aliados de EEUU.